La sensible caída de población de Vigo, confirmada este lunes, ha suscitado reacciones políticas. La ciudad ha perdido, según el Instituto Nacional de Estadística (INE), 2.855 vecinos y ha retrocedido hasta las 293.837 personas. Un dato que le aleja del gran objetivo de los 300.000 habitantes. Para el alcalde, Abel Caballero, la pandemia está detrás de este descenso. Aunque se ha mostrado cauto a la hora de opinar sobre el asunto, el regidor olívico declaró que “todo señala a que es razón covid”.
Según valoró este martes, la crisis sanitaria “siguió vaciando Vigo de gente”. Y esa población, según sus “hipótesis”, procedía “fundamentalmente” de la inmigración y tuvo que regresar a su lugar de origen por las “circunstancias difíciles” que provocó la Covid-19. En todo caso, Caballero defendió que “mayoritariamente todas las ciudades de España perdimos población”.
Lectura muy diferente ha hecho el PP de Vigo. Su portavoz municipal, Alfonso Marnotes, ha achacado la caída en el padrón a las políticas “suicidas” del alcalde. A este respecto, ha mencionado los impuestos, el precio de la vivienda o la falta de suelo industrial como causas de la pérdida de población.
Además, ha recordado que esa cifra de 293.837 personas es inferior a la existente en 2007 (294.772), por lo que Vigo ha perdido vecinos bajo el mandato de Abel Caballero, que “lleva años diciendo” que la ciudad alcanzará los 300.000 habitantes. “La realidad le desmiente”, ha apuntado Marnotes, para quien la situación es “muy preocupante y realmente grave”. Asimismo, ha añadido que el nuevo PXOM no va a solucionar este problema porque es una “chapuza”.
