La Plataforma de Bomberos Públicos de Galicia denuncia que cinco meses después de los graves fallos de coordinación ocurridos en el incendio de la nave de Fandicosta (Domaio), lejos de mejorar, no se ha solucionado nada y la situación ha empeorado.
Lunes. 14:55 horas. Redondela. Un camión y una furgoneta colisionan frontalmente en la N550. Los primeros agentes de la Policía Local y del Grumir (Grupo Municipal de Intervención) de Redondela avisan al 112 para que mande a los Bomberos de Vigo debido a la gravedad, pero son movilizados Bomberos Baixo Miño, a 23 minutos por carretera del lugar del accidente. El parque de Bomberos de Vigo, a solo 13 minutos, recibe el aviso pero se le comunica que no son necesarios.
El parte de salida del parque central de Teis apunta expresamente que desde la coordinadora de emergencias en Galicia se les dice “que no hace falta nuestra presencia”. Posteriormente, tal y como apunta el mismo informe, conocen de forma verbal por parte de la Policía y de Protección Civil que habían informado al 112 de que era necesaria la intervención de los Bomberos de Vigo.
Dos jóvenes de 29 y 25 años están atrapados en el amasijo de hierros de la furgoneta. A la llegada de los efectivos del Baixo Miño, estos dan aviso al 112 y desde la centralita los ponen en comunicación directa con Vigo para que se movilicen. El sargento ordena salir con dos vehículos, pero desde el primer aviso han pasado unos veinte minutos vitales, sumados a otros trece para llegar al lugar. El balance final del siniestro es un fallecido y un herido grave.
Miguel Ucles, presidente de la Plataforma de Bomberos de Galicia, alerta de que desde el incendio de la nave de Fandicosta, ocurrido el pasado mes de mayo, el 112 ha dejado de coordinar para limitarse a dar avisos sin activar a los Bomberos de Vigo.
“Ahora, lo que hace el 112 para no mojarse es informar de un siniestro, pero no te activa. El error de Fandicosta ha sido tan evidente que han dicho ‘por lo menos que en esto no nos pillen’, pero no para resolver el problema de fondo. Desde entonces nos llaman constantemente para informar de cualquier situación que hay en el área, no nos movilizan y casi es peor porque te avisan pero no te activan ni te coordinan”, alerta Ucles.
La situación de este lunes en Redondela se complicó todavía más, como se refleja igualmente en el parte de la actuación, cuando a las cuatro de la tarde se registraba un accidente múltiple en el Puente de Rande y el 112 llama de nuevo a Vigo. “Les indica que los van a poner en contacto con los Bomberos del Morrazo para que decida quién interviene. Aquí se ve cómo actúan, están para cubrirse las espaldas y para decir que hacen, pero no coordinan nada”, añade el responsable de la Plataforma.
La coordinación del servicio de Emergencias de Galicia quedó en entredicho el pasado mes de mayo cuando envío a los bomberos del Morrazo a un incendio que devoraba la nave de Fandicosta, mientras que no dio aviso al parque de Vigo, mucho más cerca del lugar. En los días posteriores, la polémica se enconó hasta el punto de que responsables del 112 acusaron a los bomberos vigueses de mentir. Entonces, la Xunta de Galicia anunció que revisaría el protocolo de actuación.
“La revisión del protocolo ha sido esa, la supuesta mejora que iban a hacer ha supuesto que ha desaparecido el protocolo. Ahora ya directamente nos informan para que entre nosotros nos arreglemos. La mejora del protocolo de bomberos de Galicia ha sido su desaparición. ‘Fala ti a ver se arreglades’. Es una broma”, lamenta Ucles.
Grabaciones centralita
La polvareda de Fandicosta sigue muy presente en las conversaciones entre el 112 y Vigo, al menos eso parece por lo ocurrido el lunes tras el accidente de Redondela. “Al compañero que estaba en la centralita del parque de Teis le recriminan que le habían informado para salir y querían revisar en ese momento la grabación. Evidentemente, el compañero les responde que lo primero será ir a la intervención, antes de lo que ha dicho o ha dejado de decir”, afirma.
La principal queja de los bomberos es la falta de un sistema de emergencias que ponga en común el trabajo de todos los parques, tanto los municipales como los de gestión privada. “El sistema de gestión indirecta Made in Galicia está dando un mal servicio al ciudadano y supone un lucro para unas empresas que no aportan nada. Eso provoca que de un funcionario de una administración local a un trabajador de una empresa privada no haya forma de trabajar conjuntamente, porque los intereses son privados”, explican desde la Plataforma.
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