“Parece que están decididos a condenar la competitividad del tejido empresarial del noroeste nacional, pero en realidad este anuncio es la guinda de una gestión concatenada de errores e incompetencias”, se lamenta Cebreiros en un comunicado de prensa.
El responsable de la patronal pontevedresa añade que «los sinsentidos comenzaron con la inexplicable actuación de Joaquín Almunia, recuerda, quien siendo comisario de economía de la Unión Europea (2004-2009), se negó a incluir a Galicia, Asturias y Cantabria en un trazado mucho más racional que tuviera en cuenta su peso económico y social.
”Tampoco tiene explicación que ni José Blanco, ministro gallego de Fomento en la misma época, ni el entonces bipartito que gobernaba la Xunta de Galicia, movieran un dedo. Sencillamente, no hicieron nada para que el Noroeste pudiera superar su condición periférica en un momento en el que era una prioridad en la EU igualar a todas las regiones, al menos en lo que a infraestructuras se refiere”, recuerda el presidente de la CEP.
Una vez más, insiste, Galicia pierde una oportunidad histórica y resulta severamente perjudicada. Pero también, opina, estas decisiones alejan a España de tener una fachada atlántica competitiva. “El bombardeo de malas noticias es incesante. El sector pesquero ve amenazado su futuro por las políticas europeas, los retrasos de la llegada de la Alta Velocidad, y ahora esto…, y mientras, otras regiones y países están haciendo sus deberes”.
“Cada uno de estos errores políticos, humanos, o como quieran calificarse, nos ha relegado un poco más a ser una de las esquinas peor comunicadas de Europa. Definitivamente, estamos perdiendo el tren del progreso. Estas son oportunidades que tardarán décadas en subsanarse y su impacto dinamita las posibilidades de nuestras pymes de tener un acceso ágil y moderno al mercado europeo”, concluye.