El Astillero Barreras está más cerca de encontrar una solución a su crisis tras el principio de acuerdo al que llegaron este viernes los representantes de la naviera Ritz Carlton, cuyo primero crucero encargado a la empres viguesa está en la grada, y los propietarios del 75% de las acciones.
La compra de ese paquete accionarial, que supondría aportar entre 50 y 60 millones de euros para cubrir el sobrecoste del crucero de lujo que se construye en la grada de Beiramar, dejaría el astillero en manos del armador y supondría también eliminar de la ecuación al empresario José García Costas, que pretendía igualmente la compra.
Según informan este sábado varios medios de comunicación, el acuerdo se cerró con PMI, filial de la petrolera mexicana Pemex, que dispone del 51 por ciento del capital, y con el grupo Albacora, propietaria el 24,5 por ciento de los títulos, que aceptar ceder sus derechos a Ritz Carlton.