La adquisición de este equipo, valorado en más de 200.000 euros, reduce sustancialmente los tiempos de la intervención y logra unos niveles de coagulación que evitan pérdidas de sangre significativas, hasta el punto que los pacientes no necesitan transfusiones.
Este nuevo láser permite también, al contrario que otras tecnologías que “queman” el adenoma, aislarlo y trocearlo para proceder a su análisis anatomopatológico, y puede ser utilizado para operar adenomas de cualquier tamaño. Con otras técnicas, a partir de 80 cm3 de volumen de la próstata está indicada la cirugía abierta, con lo que ello supone de sangrado, molestias para el paciente y largos tiempos de ingreso.
El nuevo Holmium 120 fue presentado como gran novedad mundial en el último Congreso Europeo de Urología, celebrado en abril del año pasado en Estocolmo. Cuatro meses después, el servicio de Urología de Povisa se convirtió en el primero de España en probarlo y, tras concluir un exhaustivo proceso de formación, el hospital ha adquirido el equipo y ya ha comenzando a operar con él, tanto para la hiperplasia de próstata como para las piedras de riñón, uretra y vejiga, donde ha demostrado la misma efectividad.
Hacia la cirugía ambulatoria de la próstata
A raíz de los excelentes resultados quirúrgicos del nuevo láser, el servicio de Urología de Povisa trabaja en la actualidad en el desarrollo de un protocolo para que los pacientes con hiperplasia de próstata puedan ser operados por vía ambulatoria y se incorporen rápidamente a su vida normal, lo que supone un cambio revolucionario para una patología que a menudo necesitaba de hasta cuatro días de ingreso. Actualmente, los pacientes operados en Povisa con el nuevo láser se dan de alta al día siguiente y sin necesidad de llevar sonda a su domicilio.
La hiperplasia de próstata afecta a la mitad de los varones por encima de 45 años y se caracteriza, dependiendo de su gravedad, por producir molestias, dificultades y bloqueos en la micción. En la actualidad existen pocos tratamientos realmente efectivos que reduzcan la próstata, con la desventaja de que provocan efectos secundarios que afectan a la esfera sexual.
