La técnica Nellix consiste en un procedimiento basado en la introducción de una prótesis de aorta abdominal en combinación con la inyección de un líquido que rellena el saco del aneurisma, que lo desvitaliza y excluye de la circulación. Según explicó el jefe de la Unidad, Moisés Casal, «se trata de un procedimiento más seguro y definitiva, ya que con las otras técnicas existe entre un 15 y 20 por ciento de probabilidades de que el saco del aneurisma vuelva a llenar y generar complicaciones, mientras que la Nellix elimina completamente el aneurisma y el riesgo de futuras complicaciones. Además, supone un ahorro a largo plazo ya que requiere muchos menos controles evolutivos que las técnicas actuales».
Por ahora se ha empleado esta técnica con seis pacientes con aneurisma abdominal y los resultados fueron completamente satisfactorios. Se trata, por lo tanto, de un procedimiento más complejo y que requiere un cierto grado de adiestamiento por parte de los radiólogos intervencionistas ya que «a diferencia de otros procesos, en el tratamiento endovascular del aneurisma de aorta, el radiólogo intervencionistas tiene que realizar un análisis y diseño personalizado de la intervención, ya que cada anatomía es diferente y hay que medir longitudes, diámetros, ángulos, etcétera, por lo que esta actuación exge una gran precisión», concretó Casal.
Además de esta técnica innovadora, la Unidad de Radiología Intervencionista está implantando de forma rutinaria las prótesis de aorta abdominal a través de un procedimiento sin cirugía, con técnica percutánea y con alta précoz. A este respecto, el doctor Casal señala que «el heccho de implantar una prótesis de este tipo representa un avance sustancial al pasar de realizar una apertura quirúrgica en las ingles o en el abdomen para colocar la prótesis a una mínima incisión en la piel». Esto permite realizar la intervención de manera casi ambulatoria, con una hospitalización de corta estancia ya que en 18 horas el paciente está dado de alta. Las últimas treinta prótesis se han implantado con esta modalidad, con un porcentaje de éxito del cien por cien.
Técnicas no invasoras
Los aneurismas abdominales osn dilataciones anómalas de las arterias del abdomen, y que al romperse provocan hemorragias abdominales. En general, es frecuente que los pacientes que sufren un aneurisma tengan un sangrado dado que los tejidos de esa zona quedan debilitados. No es una patología de gran prevalencia, aunque las consecuencias suelen ser muy graves. Afecta más a los hombres que a las mujeres en una proporción de 80 a 20. No suele producir sintomatología por lo que el diagnóstico es de «forma incidental» tras una ecografía, TAC o resonancia. Dependiendo del diámetro del aneurisma se valora el tratamiento.
La Unidad de Radiuología Intervencionista del Chuvi realiza cerca de unos 2.000 procedimientos anuales, 1.600 intervenciones generales y más de 300 neurorradiológicas. Entre los más frecuentes están las embolizaciones de miomas, tratamiento del cáncer y embolizaciones de aneurismas intracraneales.