Una vez sometido a un proceso de valoración de vehículos que determine su precio de mercado real, si se desea obtener la mayor cantidad de dinero posible en la venta, es necesario seguir una serie de pasos. En este sentido, Galicia ha demostrado ser una de las referencias en el mercado de segunda mano de España. Según datos proporcionados por Gamvan (Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a motor) las cifras alcanzaron, durante 2015, las 46.000 ventas, triplicando así los números de nuevas matriculaciones, que se quedaron en 17.000.
Poner a punto el vehículo
La antigüedad es el aspecto que más condiciona el precio de un vehículo. Sin embargo, a la hora de ponerlo en venta, hay otros factores que influyen. Dejando a un lado el tema del número de kilómetros realizados, el hecho de contar con ruedas nuevas o con poco uso, haber pasado recientemente la Inspección Técnica de Vehículos o disponer de una carrocería libre de abolladuras y arañazos son otros factores que influyen ostensiblemente. De hecho, el valor de dos coches de idéntico modelo y similar edad puede variar enormemente a causa de ellos.
No precipitarse a la hora de vender
Los expertos en automoción saben que no todas las épocas del año son iguales a la hora de vender un vehículo. En este sentido, los meses de septiembre y octubre, así como diciembre y enero, son los peores para deshacerse de un coche de segunda mano. Esto se debe, fundamentalmente, a que, respectivamente, son las épocas en las que las marcas sacan a la luz sus nuevos modelos y a que la Navidad hace que la oferta de automóviles usados sea muy elevada.
Encontrar un buen comprador
Puede parecer una obviedad, pero encontrar un buen comprador no es sencillo. En resumen, este debe ser el que mayor interés muestre, más facilidades ofrezca y mejores condiciones de venta permita. Para conseguir dar con él es vital, por un lado, anunciar el vehículo en cuestión en tantos medios como sea posible, desde los que operan a través de Internet hasta aquellos que siguen fórmulas más tradicionales. También es importante tomárselo con calma y no decantarse por el primer interesado que pregunte por el coche. Una mala elección puede suponer muchos problemas a posteriori.