El presidente de la Diputación de Pontevedra, Luis López, expresó este miércoles su rotundo rechazo al boicot que obligó a la cancelación anticipada de la etapa de La Vuelta entre Poio y Mos, celebrada el pasado martes.
En una comparecencia ante los medios, López denunció que las acciones llevadas a cabo por algunos manifestantes «pusieron en riesgo la seguridad de los ciclistas y del público», y defendió el equilibrio entre el derecho a la protesta y el respeto a los eventos deportivos.
«Sí al derecho a la manifestación, no al boicot. Sí a la libertad de expresión, no a arriesgar la seguridad de los ciclistas«, afirmó el presidente de la Diputación y responsable provincial del Partido Popular quien también manifestó su solidaridad con el pueblo palestino y condenó el sufrimiento que vive la población en Gaza.
«Yo también quiero la paz en Gaza y muestro toda mi empatía con las víctimas. Pero hay formas de manifestarse que no pueden poner en peligro a otras personas», insistió.
Luis López también salió al paso de «noticias falsas» aclarando que «ningún operario de la Diputación de Pontevedra pintó, tapó, ninguna de las banderas de Palestina que había en las carreteras de titularidad provincial».
Durante su intervención, López detalló algunos de los hechos que llevaron a la suspensión de la etapa, como la tala de un árbol para bloquear la carretera, el acceso sin autorización al Castillo de Soutomaior y la desobediencia a los cuerpos de seguridad. «Eso no son manifestaciones», remarcó, al tiempo que pidió explicaciones al subdelegado del Gobierno en Pontevedra, Abel Losada, sobre el dispositivo de seguridad desplegado para la etapa.
El presidente de la Diputación también cargó contra la actitud del Bloque Nacionalista Galego (BNG), al que acusó de incurrir en una «doble vara de medir».
Cuestionó que representantes del BNG apoyaran la participación de equipos israelíes en otros eventos deportivos celebrados en Galicia, como una etapa del Gran Camiño en Lugo, los mundiales de vela, lucha o triatlón en Pontevedra, sin promover protestas similares. «¿No había nada en Gaza por lo que movilizarse entonces?», preguntó de forma retórica, aludiendo directamente al alcalde de Pontevedra y a otros regidores nacionalistas.
López mostró su preocupación por el precedente que, a su juicio, podría sentar el boicot del martes. «¿Quién decide qué competiciones se permiten y cuáles hay que boicotear? ¿Significa esto que allí donde gobierne el BNG ya no habrá competiciones deportivas internacionales con deportistas israelíes?», cuestionó.
En este contexto, subrayó que la Diputación de Pontevedra continuará apostando por el deporte como herramienta de cohesión y proyección internacional. «Esta administración va a seguir respetando la ley y el mismo Estado de Derecho que ampara el derecho de manifestación y el derecho a celebrar una competición deportiva», declaró.
Finalmente, el presidente quiso lanzar un mensaje de estabilidad y continuidad: «El boicot no es la imagen que las Rías Baixas quieren proyectar al mundo. Somos un territorio pacífico, cordial y abierto a ciudadanos de todas partes».
«Vamos a seguir siendo la provincia del deporte», concluyó, reiterando su intención de que La Vuelta regrese a la región en futuras ediciones.
Actuación policial «impecable»
Mientras, el subdelegado del Gobierno en la provincia de Pontevedra, Abel Losada, ha defendido la actuación policial «proporcionada e impecable» en la llegada de La Vuelta a Mos este martes, una llegada que tuvo que adelantarse en 8 kilómetros debido a las protestas propalestinas de activistas que se concentraron en el Alto de San Cosme y en otros puntos de la carrera.
Tras lo sucedido, Losada ha manifestado su «condena» por la interrupción de la etapa de La Vuelta debido a la «ocupación del espacio público» por los manifestantes, aunque ha insistido en trasladar su apoyo «al libre derecho de manifestación y reunión para transmitir la solidaridad del pueblo español con el sufrimiento del pueblo de Palestina, que está padeciendo un genocidio execrable».
«Esa es la opinión de la inmensa mayoría de los españoles, comenzando por su Gobierno y su presidente, Pedro Sánchez. De esto hay pocas dudas. Por eso no comprendo que algunos de los manifestantes en el Alto de San Cosme gritasen cómplices a los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, que tuvieron una actuación proporcionada e impecable», ha proclamado el subdelegado, que ha recordado que esos mismos agentes de Policía Nacional y Guardia Civil han estado colaborando hasta hace unos días en la lucha contra los incendios forestales que asolaron Galicia y estuvieron también cooperando con los afectados por la Dana de Valencia.
Abel Losada ha reiterado que la actuación del dispositivo, compuesto por casi medio millar de guardias civiles y policías fue «medida, justa y muy profesional», y ha trasladado su «orgullo» por dicha actuación, felicitando expresamente a todos los agentes y sus mandos.
«Rédito político»
Por otra parte, ha afeado la actitud de «provocación» de algunos dirigentes del PP, y se ha referido a la alcaldesa de Mos, Nidia Arévalo, y al presidente de la Diputación de Pontevedra, Luis López.
La regidora de Mos publicó en sus redes sociales un mensaje en el denunciaba que la Subdelegación del Gobierno «no estuvo a la altura» para garantizar la seguridad en La Vuelta, «una de las mejores pruebas deportivas del mundo», mientras que sí actuó correctamente la Policía Local del municipio. Igualmente, condenó la actitud «irresponsable» de quien «llamó y alentó a la violencia»: «Mos no merecía esto. Llevábamos mucho tiempo trabajando para mostrar lo mejor de nuestro municipio y no podemos permitir que la violencia gane nunca», ha publicado en sus redes sociales.
Mientras, el presidente de la Diputación y presidente provincial del PP, Luis López, manifestó también -además de en rueda de prensa- a través de redes sociales su acuerdo con la libertad de expresión y el derecho a manifestarse, pero rechazó el «boicot» y poner en riesgo la «seguridad». Asimismo, señaló que «lo que hoy es Gaza, ayer era otro problema y mañana será cualquier otro», porque «lo que importa es agitar siempre una pancarta» y apuntó directamente al BNG y al «radicalismo» por lo ocurrido en Mos.
Operarios municipales para borrar banderas
Ante estas manifestaciones, Abel Losada ha pedido «sentidiño» a los dirigentes del PP «que parecen empeñados en sacar rédito político a toda costa de estas manifestaciones». «No parece haber sido una buena idea borrar las banderas palestinas de las carreteras con pintura negra enviando a operarios municipales. Y no parece una idea muy feliz culpar a esta subdelegación de lo sucedido. No entiendo muy bien si la señora alcaldesa de Mos pretendía que este humilde subdelegado hubiera ordenado cargar contra la gente que portaba banderas y mensajes contra un genocidio», ha ironizado, y ha pedido a Nidia Arévalo «que lo aclare».
Con respecto a lo dicho por Luis López, ha subrayado que «los manifestantes están con las pancartas que consideran». «Provocar, azuzar, meter el dedo en el ojo al que piensa distinto y está legítimamente indignado con el genocidio que se está perpetrando en Gaza, no es un buen camino», ha incidido.
Finalmente, también ha condenado las declaraciones del diputado del BNG, Néstor Rego, por mostrarse «orgulloso del corte de la carretera y la interrupción de la etapa de La Vuelta». «Me parece un error, porque se puede expresar el dolor y la repulsa por este genocidio sin alterar el orden público ni sobre todo poner en peligro la seguridad de las personas», ha sentenciado.
La Vuelta abandona Galicia
La salida de la 17ª etapa de ‘La Vuelta’, que ha comenzado este miércoles en el municipio ourensano de O Barco de Valdeorras, ha transcurrido sin altercados graves, acompañada de una protesta organizada por la Coordinadora Galega de Solidariedade con Palestina frente al Hospital Comarcal.
Según han trasladado desde la Subdelegación del Gobierno en Ourense, la salida transcurrió con normalidad a las 13.30 horas desde el Parque do Malecón, en dirección al Bierzo donde finalizará la etapa.
Según ha señalado Eladio Santos, subdelegado del Gobierno en Ourense, el evento estuvo acompañado de dispositivos de seguridad de la Guardia Civil y de la Policía Nacional, un «despliegue habitual» en La Vuelta para «garantizar la seguridad» de ciclistas, participantes y espectadores.
Eladio Santos ha recalcado, además, la importancia de «respetar el derecho y libertad» de la ciudadanía a concentrarse y manifestarse ante «los hechos que están sucediendo en Gaza» y conseguir la «fórmula» para «combinar perfectamente» la «seguridad del evento» y la «libertad constitucional de la ciudadanía».
Al evento han acudido también el alcalde de O Barco de Valdeorras, Aurentino Alonso (PSdeG) y el presidente de la Diputación de Ourense, Luis Menor (PP).
Otras protestas
En Galicia, a la de este miércoles en la provincia de Ourense se suma la protesta organizada el pasado domingo, 7 de septiembre, en la provincia de Lugo, en el tramo final de la 15ª etapa a su paso por O Corgo y Monforte de Lemos.
Una protesta que dejaba 10 detenidos entre los cuales se encontraba la representante comarcal de Lugo Sur del BNG, Rosana Prieto, que a las 20.00 horas había sido puesta en libertad.
Asimismo, también en Pontevedra, cerca de un millar de personas bloqueaban el tramo final de La Vuelta este martes en la localidad de Mos, que tuvo que finalizar 8 kilómetros antes de la meta prevista.
En concreto, los manifestantes habían realizado un tapón humano en la carretera por donde tenían que pasar los ciclistas, pero fueron desalojados por los agentes de policía.