En este sentido, Fidalgo ha subrayado que estos doce años de gobierno socialista se traducen en “menos equipos de élite que nunca, cero inversiones en infraestructuras y una chapuza en Balaídos como proyecto estrella”.
Así, Fidalgo se ha preguntado “dónde estaba el Octavio y dónde está ahora; dónde estaba el Vigo Voleibol y dónde está ahora; dónde el Celta femenino de baloncesto o el Xuvenil de Teis; por qué dejó caer el proyecto que había en Vigo con el Gestibérica para tener un equipo de ACB -¿acaso en Santiago o en Lugo son más listos?-; o que ha pasado con el Concurso Hípico Internacional”. “Eso sí, para hacer una foto y salir en los periódicos, al alcalde sí que le interesa el deporte de Vigo”, añade.
Una situación que el edil popular ha hecho extensible a proyectos y actuaciones centrados en el deporte base como el Programa Siareiros o la Fundación VIDE, que recibe ayudas hoy en día “que ni se fiscalizan”: “Es un Expediente X”.
En este marco, Fidalgo ha afirmado que sólo el año pasado se dejaron sin invertir cinco millones del presupuesto de Deportes, al tiempo que se ha preguntado qué fue de la remodelación del complejo de Traviesas “que nos vendieron hace ya tres años”, o de las dos piscinas olímpicas prometidas por el alcalde “mientras que nuestros hijos se tienen que ir a competir fuera de Vigo, porque aquí no hay piscinas donde se puedan organizar campeonatos de natación o waterpolo”.
“Porque si hablamos de infraestructuras, estos doce años también son un desastre”, ha continuado Fidalgo, resaltando que a su juicio el mejor ejemplo es la “chapuza de Balaídos”, con un gobierno municipal enfrentado con el Celta y “acusando a los aficionados de mentir cuando les caen cascotes encima”. Ante esto el PP ha advertido de que el alcalde debería pedir disculpas a los seguidores del conjunto vigués.
En este contexto, el popular ha criticado que la única actuación en infraestructuras deportivas que se le ha ocurrido a este gobierno local fue “tapar la piscina de Teis después de gastar 800.000 euros de todos los vigueses en ella”. “La ciudad necesitaba esa piscina, y taparla costó otros 300.000 euros. Eso no se le ocurre ni al que asó la manteca”, ahonda. Una actuación que, junto al estado de “auténtica vergüenza” de las pistas de Balaídos”, suponen el “mayor reflejo” de la “incompetencia” de doce años de gobierno socialista.
“Tenemos un gobierno populista al que le gusta el folclore, el caciquismo, la publicidad y la propaganda; todo lo contrario de lo que promocionaba Caballero en 1997 cuando se presentaba de candidato a la Xunta”, ha incidido el edil ‘popular’ a la vez que mostraba aquel cartel electoral.