“Si he tenido los jugadores, sí he jugado así pero si no tienes extremos es más complicado”, ha declarado al ser cuestionado sobre este asunto. Óscar quiere primero “ver” bien el potencial y las carencias de los efectivos que tiene a su disposición para luego tomar decisiones en este terreno.
En todo caso, el entrenador ha dejado claro que el equipo está rindiendo por debajo de su nivel y es necesario revertir la situación cuanto antes. “Este equipo tiene que competir mejor de lo que lo está haciendo”, ha apuntado. No obstante, ha recordado que en estas circunstancias la confianza se recupera poco a poco. “Es un proceso que intentaremos completar lo más rápido posible”, ha dicho.
El nuevo técnico celeste ha extendido la responsabilidad a todo el grupo y no sólo a los pesos pesados. En todo caso, se ha mostrado “totalmente convencido” de que hay “mimbres” para salir de esta situación. Para ello ha propuesto como receta mucho trabajo y que los jugadores sean “proactivos” e “inteligentes”. “Que sepan lo que está pasando en el terreno de juego”, ha señalado. Igualmente, uno de sus objetivos será “que la afición se sienta orgullosa de cómo jugamos”.
Contrato
Óscar García tiene fama de tomar decisiones impulsivas por cómo se ha ido de los diferentes clubes en los que ha militado. De hecho, nunca ha cumplido un contrato completo. Tras reconocer sin complejos que es un debutante en la Liga española, se ha defendido recordando que “no me he ido de ningún equipo en el que las cosas fueran mal”.
“Cuando me reúno con los equipos les explico las cosas que me gustan y las cosas que no me gustan. Si las cosas que no me gustan pasan más de una, dos o tres veces entonces tomo decisiones”, ha advertido.
Además, ha aclarado que en su contrato con el Celta no existe ninguna cláusula que implique una renovación automática en función de objetivos. “Es sólo hasta final de temporada. Es lo mejor. Si estamos contentos, nos sentamos a hablar. Si no, no hay nada que objetar ni que trabajar. No me gusta cobrar sin trabajar”, ha argumentado.
El entrenador catalán también ha informado de que a su cuerpo técnico todavía le falta por incorporar al preparador físico, que “está trabajando fuera y está intentando resolver su situación” para volver a España. Asimismo, no se ha mostrado preocupado por la situación política y de seguridad que atraviesa Cataluña: “Yo creo que vamos a jugar tranquilamente”, ha pronosticado.