Mina cuenta con una cláusula de rescisión de 10 millones de euros y este periódico explica que su nombre surgió en las conversaciones entre los dos clubes por la venta de Iago Aspas, que regresó al Celta la pasada semana. El delantero está representando por el mediático agente portugués Jorge Mendes, que también se ha hecho cargo recientemente de los asuntos de Unai Emery, el recién renovado entrenador del Sevilla. Mina cuenta con una oferta de renovación del Celta, que todavía no ha aceptado.
El propio Diario de Sevilla reconoce que la operación no es sencilla, puesto que el club celeste no quiere desprenderse de una de las perlas de su cantera. Carlos Mouriño, presidente del Celta, ha repetido hasta la saciedad que no tiene la intención de desmantelar el equipo y que todo aquel club que quiera hacerse con los servicios de un jugador con contrato en vigor deberá abonar de forma íntegra la cláusula de rescisión. El Sevilla cuenta con alternativas en el caso de que no pueda hacerse con los servicios de Mina. El uruguayo Diego Rolán y el holandés Boetius son los nombres que se barajan.
Además del interés del Sevilla, en los últimos días también había surgido el del Benfica. El gran final de Liga que protagonizó el canterano lo ha convertido en una pieza cotizada en el mercado de verano. Los cuatro goles que le hizo al Rayo Vallecano en un solo partido le llevaron a ser historia viva de la Primera División española.
Además de Santi Mina, Monchi también se ha interesado recientemente por otro joven valor de la cantera del Celta, Jonny Castro. Como en el caso de Mina, el club celeste no está dispuesto a dejar marchar a uno de los futbolistas con más progresión de su plantilla.