“Ganar este partido sería un golpe importante. Si ganamos dejamos al Celta a 14 puntos, lo cual sería una distancia casi insalvable”. En cambio, ha advertido de que una vitoria local metería al conjunto vigués de nuevo en la pelea por el cuarto puesto, algo que quiere evitar a toda cosa. “Si nos ganan se ponen a ocho puntos y con el golaveraje a favor, lo que les pondría en la lucha», ha alertado.
Para poder llevarse los tres puntos, Marcelino prepara “bastantes cambios” en su once inicial respecto al que el domingo venció con claridad al Levante. Además, tras el complicado choque del jueves en Liga Europa, el técnico considera necesario realizar rotaciones en previsión de que el choque contra el Celta también vaya a requerir una “gran exigencia física”.
El técnico de Villaviciosa ha dejado claro que se acuerda muy bien del partido de la primera vuelta, en el que el Celta se benefició de la expulsión de Bailly y venció con un gol de Nolito en el minuto 90, provocando así la única derrota del Villarreal en casa esta temporada. “Siempre que un equipo te gana, quieres demostrar que no lo puede hacer dos veces. Nos ganaron en casa, pero fue un partido extraño, su primer tiro fue gol, nos expulsaron a un jugador y se llevaron el partido en el último minuto», recordó.
Halagos para el conjunto vigués
El entrenador asturiano, que ha convocado a 19 jugadores, ha alabado el juego del equipo entrenado por Eduardo Berizzo y pronosticó un partido “muy difícil” e “igualado”, que a su juicio ganará “el equipo que esté más acertado”.
«Es un equipo súper dinámico, muy intenso ya que marca en individual en jugada. La zona no existe, lo que nos obliga a hacer cosas diferentes. En ataque siempre deja a tres jugadores arriba, por lo que tienen una transición muy rápida y peligrosa. Circulan bien, los laterales aportan mucho en ataque, y tienen mucha gente en zona de finalización por lo que no va a ser fácil», apuntó.