Este programa analiza la actualidad futbolísta de manera irónica y no ha querido dejar escapar este tema estrella. Crakovia tira de tópicos para presentar al Celta. De hecho, el despacho del presidente céltico se convierte en una lonja de subasta de pescado y marisco en la que el producto estrella es el «Nolito fresco».
Este falso Bartomeu acude a la puja azuzado por un caprichoso Luis Enrique que le exige a gritos «¡quiero un Nolito!». El presidente blaugrana comienza ofreciendo 10 euros y ante la negativa de Mouriño, sube su oferta a Munir y Sandro. Esta también es rechazada y finalmente Luis Enrique se sale con la suya gracias al manos libres del móvil.
Esta el una versión humorística de un asunto que parece ya casi zanjado. Y es que el Celta ha insistido este lunes, a través de Miguel Torrecilla, en que el equipo que quiera llevarse a Nolito deberá pagar su cláusula.