En las últimas fechas, con sus actuaciones estelares ante el Villarreal, Huesca y Real Sociedad, afloraron esas peticiones por parte de la afición, rendida a su ídolo y salvador. Ha sido la mejor semana de su vida “en cuanto a goles y felicidad”, pero él sabe que la pelea de la salvación todavía no ha terminado. “No hacemos cuentas. Queda muchísimo y muchos enfrentamientos directos. Esto cambia en poco tiempo. Lo hemos vivido nosotros mismos”, advierte.
El propio Iago Aspas es conocedor de cuál ha sido el principal problema de esta campaña. Como en su día recalcó el club, las responsabilidades se rendirán al final del curso pero la estrella del Celta desliza una conclusión: “Somos un equipo muy joven, ya lo dije a principio de temporada, y con cierta inexperiencia y eso lo hemos pagado en los momentos difíciles”.
A pesar de que la permanencia todavía no se ha conseguido, el celtismo es optimista ahora y quizás eso desvía la atención hacia temas como las renovaciones o la continuidad del ’10’ celeste, pretendido cada verano por otros clubes. “Estoy muy cómodo en casa. Ahora mismo no me veo con otra camiseta que no sea la del Celta. No me he parado a pensar si jugaría en Segunda con el Celta porque la verdad es que no creo que vayamos a descender”, tranquiliza el de O Morrazo.
Pero en realidad sí hay otra camiseta que Aspas quiere vestirse: la de la selección española. La lesión le ha dejado fuera de la última convocatoria pero, visto su regreso, las opciones de volver a la lista de Luis Enrique siguen muy vivas. “Me gustaría volver a la selección. Una pena no haber podido estar en la última lista. También hay compañeros que lo están haciendo muy bien. Pero hay que seguir marcando goles y hacerlo bien en mi equipo, salvarnos y poder volver en junio”, finaliza.