Eduardo Berizzo volvió a optar por las rotaciones en Butarque y solo tres jugadores (Sergio, Mallo y Radoja) repitieron con respecto al encuentro de Copa ante el Real Madrid. La novedad más destacada fue la presencia de Lemos en la banda derecha del ataque. Estos fueron los primeros minutos en Liga del compostelano y, finalmente, su presencia resultó clave.
Al Celta le costó entrar en el partido. No lograba elaborar en el centro del campo y abusaba de los balones largos. De hecho, era el Leganés el que se acercaba al área con más peligro. El primero en probarlo fue Unai, con un disparo que atajó Sergio. Poco después, el colegiado invalidó por un claro fuera de juego una acción en la que Insua acabó rematando al palo.
Los de Berizzo no estaban cómodos y solo creaban peligro por la banda izquierda, donde se encontraba un participativo Pione Sisto. Precisamente el danés fue el primer jugador céltico que se atrevió a lanzar a portería. Fue en el minuto 25. Se marchó de hasta tres contrarios y decidió probar a Herrerín. El meta del Leganés logró detener el disparo sin demasiadas dificultades.
El primer gol llegó pasada la media hora. Hugo Mallo sacó de banda hacia Señé y el catalán envió el balón al área, donde se encontraba Lemos. El santiagués controló de espaldas, se dio la vuelta y se sacó de la manga un gran disparo con la zurda que impactó en el palo y se coló en la portería. Era el mejor estreno posible para Lemos.
Al Celta le sentó bien el gol y estiró líneas en los últimos minutos de la primera mitad, aunque no gozó de ninguna otra clara ocasión. La nota negativa fue la lesión de Rossi, que sufrió un problema muscular y tuvo que dejarle su sitio en el campo a Guidetti en el minuto 42.
La segunda parte comenzó como había acabado la primera, con el Celta bien plantado en el campo y sin que el Leganés crease peligro. Los celestes se encontraron muy cómodos y parecía que ni siquiera sería necesario apretar el acelerador para sumar los tres puntos.
El más activo de los vigueses seguía siendo Pione Sisto. El danés se movía a sus anchas por la banda izquierda y era un incordio constante para la zaga madrileña. En el 65 al fin obtuvo premio. Tras marcharse de varios rivales, pisó área y Víctor Ruiz se vio obligado a zancadillearlo para pararlo. Penalti clarísimo. Guidetti fue el encargado de transformar la pena máxima.
El Celta apenas sufrió en los minutos finales. Aunque la historia podría haber sido distinta si Guerrero no hubiera fallado un gol a puerta vacía tras un error de la zaga celeste en el minuto 83. Al final, tres puntos vitales para los de Berizzo, que recortan distancias con los puestos europeos y que están ya a seis puntos del cuarto clasificado, a la espera de lo que haga este domingo la Real Sociedad en el Bernabéu. Ahora, el Celta se centra ya en la ida de las semifinales de Copa, que se disputará el próximo jueves en Balaídos.
Leganés: Herrerín; Víctor Díaz, Mantovani, Pablo Insua, Marín; Timor (Luciano, min. 53), Rubén Pérez; Unai (Machís, min. 72), Gabriel, Szymanowski (Samu García, min. 72); y Guerrero.
Celta: Sergio Álvarez; Hugo Mallo, Sergi Gómez, Fontás, Planas; Radoja, Tucu Hernández, Señé (Jozabed, min. 89); Lemos (Jonny, min. 78), Pione Sisto y Rossi (Guidetti, min. 42).
Goles: 0-1, min. 32: Lemos; 0-2, min. 65: Guidetti, de penalti.
Árbitro: Trujillo Suárez (colegio tinerfeño). Mostró tarjetas amarillas al local Gabriel; y al visitante Fontás.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la 20ª jornada de Primera División disputado en el estadio de Butarque ante 10.123 espectadores.
