El motivo es una cláusula de compra obligatoria que ha incluido la entidad que preside Carlos Mouriño, en función de la cual el cuadro vasco debe pagar cuatro millones por el jugador si logra la salvación. A esa cantidad se le unirían 750.000 euros en variables.
Además, el conjunto olívico se guarda una parte de un hipotético traspaso futuro. Si el Alavés vende a Guidetti posteriormente, tendrá que dar al Celta un 20 por ciento de los ingresos que perciba por esa operación.
Por último, Miñambres ha aclarado que Guidetti no podrá ser alineado en los partidos que enfrenten a ambos equipos esta temporada.