Ecoloxistas en Acción ha lamentado este lunes que el Real Club Celta vaya a celebrar el centenario de su fundación, el próximo 23 de agosto, con la colocación de la primera piedra del proyecto Galicia Sports 360, en un recinto, el de Mos, «declarado ilegal» por los tribunales.
A través de un comunicado, la organización ecologista ha recordado que ha solicitado la retirada de la designación de Galicia Sport 360 como Proyecto de Interés Autonómico (PIA), y ha reiterado que ve «indicios de prevaricación» en la resolución correspondiente de la Vicepresidencia Primera y Consellería de Presidencia, Xustiza e Deportes.
Al respecto, ha recordado que la ciudad deportiva del Celta, construida en montes comunales de Mos, «fue declarada una construcción ilegal por parte del TSXG en sentencia firme», ya que el alto tribunal gallego determinó que los campos y el edificio levantados en suelo rústico carecían de las licencias adecuadas (de hecho, el gobierno local de Mos defiende que, con la aprobación de un plan especial de dotaciones, ya en septiembre del año pasado, la actuación quedó amparada por la legalidad).
«Vergonzoso»
Para Ecoloxistas en Acción «es especialmente vergonzoso que el Real Club Celta celebre el centenario de su fundación, el 23 de agosto, en un recinto declarado ilegal por los tribunales de justicia, colocando la primera piedra del proyecto Galicia Sports 360».
«Algo que, para Ecoloxistas en Acción, contrasta con los valores que reivindica el club: ‘afouteza (coraje), solidaridad y compromiso, que van ligados a su centenaria historia», han señalado, y ha añadido que la afición celeste «contempla con estupor las argucias de una directiva más preocupada por burlar la legislación medioambiental para dar pelotazos urbanísticos que en construir un proyecto deportivo y social sólido».
Por todo ello, han hecho un llamamiento a los aficionados del Celta para unirse a los comuneros de Tameiga y a las organizaciones ecologistas en el rechazo a un evento «que intenta ser un lavado de cara de una ‘desfeita’ medioambiental y urbanística en los montes de Mos, con la complicidad de la Xunta y del Ayuntamiento». «La historia, el escudo y la camiseta celeste no merecen este ultraje», ha recalcado la organización.
