«Cuando él juega mal estoy furioso yo», dijo el técnico con una clara sonrisa. A partir de ahí quitó importancia a la situación y explicó que «Guidetti tiene un carácter extrovertido que alguna veces expresa enfado, cuando sales del campo te enfadas, pero el entrenador, a veces, también tiene razón a quitarte».
El entrenador también aprovechó la cuestión para explicar que existe una relación óptima entre él y el grupo de jugadores y, también, entre los propios futbolistas. El técnico indicó que «entreno a un grupo de jugadores muy dóciles, muy buenos y, antes de ser buenos jugadores se llevan muy bien». Berizzo añadió que «no hay mejor síntoma en un equipo que cuando un futbolista festeja un gol, también lo hace el jugador que puede ocupar el mismo lugar en el campo. Iago festeja los goles de John y John los de Iago y pueden jugar en el mismo puesto. Es el estado de compañerismo que existe en el equipo».
Esta situación también se puede comprobar en los distintos entrenamientos del Celta a puerta abierta en los que Aspas y Guidetti son dos jugadores que están presentes en casi todas las bromas del equipo. En el campo parecen entenderse bien y el propio entrenador adelantó que, con casi toda probabilidad, jugarán de nuevo ante el Villarreal. «Espero que se encuentre como lo hicieron en el partido ante el Eibar», precisó.
