«Creo que encajar dos goles de la forma que lo hicimos es frustrante, eso inclina la balanza a favor de nuestro rival. Hasta ese momento creo que el partido había estado parejo, después pudimos meternos en el partido con la jugada de Wass, pero no lo logramos y con diez en la segunda parte ya fue más difícil», senaló el entrenador en la rueda de prensa posterior al choque.
Berizzo reconoció que la victoria del Málaga pudo ser más amplia. «Me parece que el Málaga encontró premio a sus jugadas a balón parado marcando dos goles y eso inclinó el partido a su favor. Luego tuvieron incluso ocasiones para marcar más goles y solo nos queda felicitarlo», dijo.
El técnico admitió que su equipo cometió errores imperdonables. «No fue un buen partido para nosotros y nuestro rival ha aprovechado todas nuestras distracciones en el juego aéreo para marcar dos goles en un partido que luego se nos complicó aún más con la expulsión», explicó. Aun así, destacó «la actitud y el esfuerzo de todo el equipo, que siempre se comporta».
El técnico del Celta no quiso entrar en polémicas arbitrales y tampoco quiso culpar de la derrota a Rubén Blanco: «De los árbitros no hablo nunca. En cuanto a Rubén, no ha sido una buena noche para él ni para el equipo. No ha sido una buena actuación de Rubén, pero tampoco de otros. No ha sido un buen partido del equipo».