Que nadie se piense que el de“Tití me preguntó” se ha convertido en un nuevo Rubén Blades renegando de los sonidos urbanos. No es eso, pero en DeBÍ TIRAR MáS FOToS el rey del reggaetón acerca su estilo a sus raíces para cantarle a sus diferentes amores: las mujeres, las que le quieren y las que le abandonan, pero también su patria, su acervo musical, emocional y social. Caribe mix pero del bueno.
Abre lo que es una declaración de principios rotunda: “NUEVAYoL” (y habrá más guiños a su fonética natal), donde samplea “Un verano en Nueva York” de El Gran Combo de Puerto Rico. “BAILE INoLVIDABLE” empieza como una balada urbana azucarada que se traviste en salsa y sabor latino, cambiando sintetizadores por un combo de metales y piano. Candidata a canción del año. WELTiTA, con la colaboración de Chuwi, manda guiño a Pau Donés (“Y por un beso de la flaca yo daría lo que fuera”, canta el Conejo Malo). “El ClúB”, que fue el primer single de adelanto, flota sobre elegante deep house para una letra de desamor y celos. La melancólica y ambiental “BOKeTE” recuerda por su intro en falsete más a Sen Senra que a la típica interpretación deslenguada y chulesca del reggaetón. Seguimos así avanzando a lo largo de un disco generoso en minutaje y canciones, diecisiete, con retornos a la tradición como “CAFé CON RON” , una plena (interpretada junto a Los Pleneros de la Cresta), género musical tradicional de Puerto Rico de delicioso diálogo solista-coro.
Lo dicho, casi veinte temas y más de una hora de música para conseguir el abrazo entre generaciones al juntar ritmos caribeños con reggaetón.
Para los que como yo estamos “fuera” del público objetivo de Bad Bunny (que en todo caso conformarán nuestros hijos) hay barreras evidentes en su propuesta musical: como letrista obviamente no es Silvio Rodríguez pero tampoco lo pretende, y la vara de medir con él debe ser otra.
En todo caso cabe valorarle como cronista de su propia mirada crítica a la gentrificación capitalista en su Puerto Rico natal, y relator de sus propios devaneos sentimentales (como tantísimas oras estrellas pop). Y ahí brilla. Y sí, canta… así, como solo él canta en el planeta (como decía Eva Soriano en un gag desternillante, canta bostezando) y eso, que es tan atractivo para la generación tiktoker, puede enervar a la del baby boom (esa que aprendió -aprendimos- a valorar voces únicas en su tiempo, nada convencionales para su época, ¿verdad?), pero en todo caso que los árboles no impidan ver el bosque: DeBÍ TIRAR MáS FOToS es un disco con atractivos suficientes para engancharnos a todos. Que venga a Balaídos o Castrelos algún verano, y así lo comprobamos.
