El escudo que muestra la fotografía, por ejemplo, pasa casi inadvertido para la mayoría de las personas que transitan en sus proximidades. Está en lo alto de un edificio de Sabarís, en Baiona, y el color de sus relieves también le ayuda a confundirse con el resto de la piedra y el cemento. Si dejáramos volar nuestra imaginación, en sus formas podríamos intuir referencias vinculadas con la industria y con la navegación. Incluso habrá quienes hagan otras interpretaciones. Sin embargo, es de suponer que todas esas formas del escudo tienen alguna relación con quien propició la construcción del edificio, probablemente alguna persona vinculada con la construcción naval, o quizá algún marino que en su retiro seguía añorando los días de navegación.