Los afectados por la explosión del polvorín ilegal en la parroquia tudense reclaman que se realice un «desescombro inmediato» de la zona cero. Piden que sea una empresa pública quien se haga cargo del mismo, ya que de lo contrario los trabajos se podrían prolongar otros seis meses. El Gobierno se ha comprometido a correr con los cargos del desescombro, pero no así con su ejecución, trasladando dicha tarea al Concello de Tui.
Recordemos que la explosión se produjo el pasado mes de mayo y a pesar de la declaración de zona gravemente afectada por una emergencia de protección civil los problemas de los afectados todavía no se han solventado.
A continuación adjuntamos el comunicado completo de los afectados por la explosión de Paramos:
«Aquí estamos de nuevo ante la Subdelegación del Gobierno. Habrá seguramente muchos viandantes y curiosos que se pregunten por qué venimos, si ya tenemos “lo que queríamos”: ayuda psicológica, desgravación fiscal y declaración de zona catastrófica. Es cierto, sí. Después de mucho esfuerzo, los vecinos afectados por la explosión de Paramos podemos respirar finalmente tranquilos por estar recibiendo ayuda psicológica localizada en nuestro centro de salud, por saber que las ayudas que recibamos no hipotecarán nuestro futuro y por la tan deseada declaración de zona gravemente afectada por una emergencia de protección civil, gracias a la cual pudimos optar a dicha desgravación.
En septiembre también logramos algo que veníamos reclamando desde el minuto cero en que fundamos la asociación: el compromiso de desescombro por parte del gobierno central. Tras este anuncio, los vecinos afectados nos reunimos en asamblea y, entre aliviados y temerosos, decidimos darle al gobierno cierto margen de tiempo para actuar. Pues bien, el plazo pasó y, ante la falta de respuestas, decidimos ir directamente al Ministerio de Política Territorial en Madrid, solo para volver a casa con la noticia de que el gobierno central sí asumirá el coste del desescombro, pero no su ejecución, y traslada dichas tareas al Concello de Tui.
Este no era el compromiso que pedíamos, señores, por eso estamos hoy aquí. Siempre solicitamos que se agilizasen los trámites y la burocracia para que pudiéramos todos volver a nuestras vidas cuanto antes y ustedes parecieron comprender nuestra urgencia en que el desescombro fuese asignado a una empresa con participación del Estado para que los trabajos, cuya duración se estima en tres meses, pudiesen comenzar a la mayor brevedad. Sin embargo, no nos entendieron: ahora tenemos que esperar a que el Concello licite el desescombro y asigne a una empresa, proceso que seguramente dure más de medio año y al que tendremos que sumarle tres meses más del propio desescombro. En resumen: los vecinos solo podremos comenzar a reconstruir nuestros hogares a finales de 2019 o principios de 2020, y todo ello en el mejor de los casos. ¿De verdad agilizaron las ayudas de zona cero para que ahora no podamos hacer nada con ellas? ¿De verdad esperan que no salgamos a la calle para gritar: DESESCOMBRO INMEDIATO?!
Díganles ustedes a nuestros niños y mayores que solo dentro de dos o tres años podrán volver a sus casas. Díganselo a los vecinos que, además del hogar, también perdieron sus negocios. O explíquenles a nuestras familias que esta no será la única Navidad que tengamos que pasar de alquiler o acogidos en casas de familiares, porque habrá otras después. Asimismo, le hemos pedido al gobierno central que, en el marco de la declaración de zona gravemente afectada por una emergencia de protección civil, articulen los mecanismos para habilitar más fondos para las segundas viviendas de zona cero y para los vehículos dañados, porque las ayudas recibidas en estos casos no son suficientes para reconstruir un hogar ni para reponer nuestros vehículos, que son nuestro único medio de transporte en la zona rural en la que vivimos.
Además, en su momento se nos dijo que el decreto ley que se iba a elaborar lo analizaríamos conjuntamente para que pudiéramos aportar nuestro punto de vista, pero nos consta que ya se ha enviado a Madrid sin que se nos haya consultado nada. Por todos estos motivos, los afectados nos vemos obligados a salir a la calle nuevamente para que sí se nos escuche y se tenga en cuenta nuestras necesidades, y seguiremos haciéndolo hasta que se reponga la última teja de nuestros hogares. Tan solo queremos recuperar cuanto antes un trocito de la normalidad que se nos arrebató el 23 de mayo y en sus manos está, señores políticos que así sea».