La Guardia Civil ha detenido a un vecino de Mos de 50 años cuya plantación de marihuana desprendía un olor tan fuerte que acabó por delatarlo.
Sucedió el pasado lunes, fecha en que los agentes, con la correspondiente autorización judicial, realizaron una entrada y registro en el domicilio y procedieron a la detención del responsable de la plantación como presunto autor de un delito contra la salud pública.
A la Guardia Civil la puso sobre la pista las quejas por el olor de varios transeúntes que pasaron por la zona. Eso llevo al instituto armado a realizar varias vigilancias en los meses posteriores, en los que pudieron verificar la existencia de una plantación de marihuana en un jardín de una vivienda unifamiliar.
Tras analizar los indicios obtenidos, se procede a oficiar al Juzgado de Porriño para mandamiento judicial de entrada y registro en el domicilio objeto de la investigación.
En total, los agentes se incautaron de nueve plantas de marihuana (cannabis sátiva) de gran tamaño; entre 160 y 180 centímetros de alto. Además, aprehendieron 257 ramas de cogollos de marihuana y siete kilos de cogollos en tres cajas y dispuestos para su introducción en el mercado ilícito. Los agenters se llevaron también una báscula de precisión, un deshumidificador y un foco de secado.
Las diligencias fueron entregadas en el Juzgado de guardia de Porriño, que decretó la libertad del detenido con la obligación de
comparecer en sede judicial cuando sea requerido.