El inicio del curso escolar ha puesto de manifiesto que mientras duren las obras en la Avenida de Madrid, a las que les quedan un par de años, difícilmente transitarán con fluidez los vehículos en Vigo. Al menos en hora punta.
Pero lo previsible es que, lejos de mejorar, el tráfico se complique todavía más de manera inminente porque el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, a través de la Dirección General de Carreteras, ha formalizado el contrato con la empresa viguesa Prace, Servicios y Obras S.A. para abordar el refuerzo estructural y la sustitución de pretiles del Viaducto de Porto, en la Autovía VG-20.
Eso significa que, si se cumplen los plazos que marca la normativa, las obras comenzarán en un plazo máximo de un mes, lo que sin duda complicará todavía más la circulación en Vigo.
La obra, licitada a finales del pasado julio por 6,5 millones de euros, aunque finalmente se ha quedado en 5,4 millones, cuenta con un plazo de ejecución de 32 meses. Casi tres años de obras, con lo que eso puede suponer para el tráfico en la ciudad.
A Prace, Servicios y Obras, que se hizo con adjudicación entre las 17 empresas que se presentaron, le toca ahora rehabilitar y mejorar el viaducto de Porto. En concreto, está previsto reforzar la estructura, sustituir los pretiles y repavimentar el firme del puente, de unos 347 metros de longitud, ubicado entre los kilómetros 9,65 y 10 de la autovía que conforma la circunvalación de Vigo, a la altura de la parroquia de Beade.
Caballero promete mejoras
El alcalde, Abel Caballero, ha salido este miércoles al paso de las críticas del BNG por el caos circulatorio en Vigo, especialmente evidente en zonas como la Avenida de Madrid o la calle Lepanto. Según Caballero, «hay inconvenientes de tráfico porque hay obras, pero ya desaparecen el próximo martes».
Se refería el alcalde así a la previsión de abrir el principal acceso a la AP-9 desde Vigo, el situado en la calle Lepanto, gracias a que se habilitará la circulación rodada a través de un carril mientras los trabajos de humanización entran en la tercera fase del plan de tráfico asociado a las obras.
De este modo, a partir del próximo martes, los turismos ya podrán circular por la céntrica vía viguesa para acceder al túnel que se dirige a la autopista así como a la rotonda de acceso al centro comercial Vialia y a la calle Alfonso XIII, lo que aliviará notablemente el tráfico en el centro de la ciudad.