La playa de Samil, el arenal más emblemático de Vigo, se encuentra en el ojo del huracán debido a las molestias causadas por el montaje de O Marisquiño 2025, el festival de cultura urbana que se celebrará del 7 al 10 de agosto. La ocupación masiva de aparcamientos, incluidos los destinados a personas con movilidad reducida, junto con las restricciones de tráfico en la Avenida de Samil, ha desatado un malestar generalizado entre vecinos y turistas en plena temporada alta.
Un montaje que limita el acceso a Samil
Desde finales de julio, el Concello de Vigo ha implementado un plan de tráfico y ocupación de espacios para preparar O Marisquiño, un evento que combina competiciones de skate, BMX, breakdance y conciertos, atrayendo a miles de visitantes. Sin embargo, estas medidas han afectado directamente a los usuarios de la playa de Samil. El aparcamiento número 2 está clausurado desde el 30 de julio y no reabrirá hasta el 18 de agosto debido a la instalación de una estructura para skate y BMX. Además, se han ocupado las zonas verdes entre los aparcamientos 2 y 3 para puestos de restauración, graffiti y un escenario secundario, y se ha prohibido estacionar en tramos de la Avenida de Samil, desde la pista de automodelismo hasta la bajada a la playa de la Fuente.
Un punto especialmente controvertido ha sido la ocupación de las plazas reservadas para personas con movilidad reducida, integradas en los aparcamientos afectados. Estas plazas, esenciales para garantizar la accesibilidad de la playa a todos los usuarios, han quedado inutilizadas durante el montaje, lo que ha generado críticas por la falta de alternativas para este colectivo. El aparcamiento número 4, donde se instalará el escenario principal de los conciertos, permanecerá cerrado del 4 al 13 de agosto, agravando la escasez de plazas en una playa que recibe miles de bañistas diarios en verano. Las pruebas de Freestyle Motocross en la avenida han reducido la circulación a un carril en dirección salida hasta el 4 de agosto, y las restricciones generales priorizando el transporte público se mantendrán hasta el 10 de agosto.
«No es justo en pleno verano»
El descontento entre los usuarios de Samil es evidente, con críticas centradas en la duración y el alcance de las restricciones. “No pueden usarlo todo así en pleno verano, y menos las plazas para personas con movilidad reducida”, lamenta María, una vecina de Navia, quien subraya la importancia de garantizar la accesibilidad. “Es que no es un fin de semana, ya van 10 días ocupando los parkings y aún no ha empezado”, añade Carlos, un turista de Ourense que visitaba Samil con su familia.
La coincidencia con el Rallye Rías Baixas, celebrado hace unas semanas, ha intensificado las molestias ya que el parque de asistencia del rallye cerró temporalmente los aparcamientos cercanos al Museo Verbum y frente al McDonald’s, dejando a los bañistas con opciones limitadas. “Entre el rallye y esto, es imposible venir a la playa y aparcar”, se queja Ana, una viguesa de 30 años. La ocupación de las plazas para personas con movilidad reducida ha añadido una capa de indignación. “Para unos pocos días que tenemos de playa, no es justo, especialmente para quienes necesitamos esas plazas”, afirma Lucía, una turista portuguesa con discapacidad que frecuenta Samil.
Propuestas como trasladar el festival a recintos como A Madroa o el Ifevi han ganado fuerza entre los vecinos. “Que se lo lleven a la Madroa o al Ifevi y que no molesten”, reclama Javier, un residente de Alcabre, reflejando un sentimiento compartido de que el evento prioriza a sus asistentes sobre los usuarios habituales de la playa.
Samil, un arenal bajo presión constante
Con sus 1.115 metros de longitud y su amplia oferta de servicios (piscinas infantiles, canchas deportivas y zonas verdes), Samil es un pilar del ocio y el turismo en Vigo. Según Turismo de Galicia, su accesibilidad mediante autobuses urbanosy sus aparcamientos gratuitos la convierten en un destino clave para familias y visitantes. Sin embargo, la saturación de los estacionamientos, ya habitual en verano, se ha agravado con el montaje de O Marisquiño, especialmente por la ocupación de las plazas para personas con movilidad reducida, un recurso esencial para garantizar la inclusión.
Las obras de regeneración dunar, iniciadas en octubre de 2024 con una inversión de 1,8 millones de euros del Ministerio de Transición Ecológica, buscan ampliar el arenal retranqueando el paseo marítimo. Aunque estas obras prometen “prácticamente duplicar” la superficie de la playa, según el alcalde Abel Caballero, también han contribuido a las molestias, con cierres puntuales de tramos de la Avenida de Samil y la reubicación de plazas de aparcamiento. La combinación de estas obras con los preparativos del festival ha convertido el acceso a Samil en un caos que a diario deben soportar vecinos y visitantes.
Respuesta del Concello y demandas de los vecinos
El Concello de Vigo defiende la celebración de O Marisquiño en Samil, destacando su impacto económico y su prestigio como “el mejor certamen de skate del mundo”, según Abel Caballero. Para mitigar las molestias, se han habilitado desvíos por el Camiño Fontes y la rúa Argazada, y se ha garantizado el paso del transporte público con señaleros. El Concello asegura que los aparcamientos se reabrirán progresivamente a partir del 10 de agosto, con normalidad total prevista para el 18 de agosto. Sin embargo, no se han anunciado medidas específicas para compensar la ocupación de las plazas para personas con movilidad reducida, lo que ha generado críticas por parte de asociaciones de accesibilidad.
Los vecinos y usuarios de Samil demandan soluciones como un refuerzo de las líneas de autobuses urbanos o la habilitation de parkings alternativos. También se propone reducir la duración del montaje o trasladar actividades como los conciertos o las competiciones de motocross al Ifevi, un recinto preparado para eventos masivos que no interferiría con el acceso a la playa.
O Marisquiño, que celebra su 25º aniversario en 2025, es un motor económico para Vigo, con un impacto positivo en la hostelería y el turismo, según el Concello. Sin embargo, la ocupación de espacios clave, incluidas las plazas para personas con movilidad reducida, ha reavivado el debate sobre cómo conciliar eventos de gran envergadura con el uso cotidiano de los espacios públicos. Mientras los organizadores ultiman un festival que promete ser “histórico”, los usuarios de Samil piden que se priorice su derecho a disfrutar de la playa en verano, especialmente para colectivos vulnerables. Vigo se prepara para un fin de semana vibrante, la ciudad enfrenta el reto de equilibrar su oferta cultural con la accesibilidad y el bienestar de sus vecinos y visitantes.
