La madrugada de este miércoles, 8 de julio, Vigo ha sido la última noche tropical, por ahora, en la que las temperaturas se mantuvieron en el entorno de los 30 grados hasta altas horas de la noche. El calor sofocante finaliza por el momento y ya en la jornada de este miércoles se notó la entrada de brumas que impidieron que la temperatura no superase por primera vez en más de una semana los 30 grados. A partir de ahora, y hasta la próxima semana al menos, el mercurio descenderá progresivamente y le costará alcanzar los 25 grados en la ciudad viguesa, donde se esperan máximas más propias de la primavera que de la época veraniega y, desde luego, lejos de las máximas registradas en la recta final de junio y lo que llevamos de julio.
De hecho, este jueves no se espera que el mercurio supere los 25 grados, un cambio importante tras un periodo más largo de lo habitual en estas latitudes de jornadas sofocantes y noches en las que el calor complicaba conciliar el sueño como la pasada, en la que la mínima en la ciudad se quedó en los 20,42 grados. De hecho, desde el 23 de junio las temperaturas mínimas en Vigo no han bajado de los 17 grados y en estos primeros nueve días de julio tan solo descendió dos noches por debajo de los 19 grados.
Inestabilidad atmosférica
La previsión de Meteogalicia para la segunda mitad de la semana apunta que ganarán presencia las nubes, con nieblas matinales el jueves y mínimas que descenderán moderadamente, mientras que las máximas serán normales para la época.
Así, señala que a partir de este jueves irá aumentando la inestabilidad atmosférica, con nieblas matinales y brumas costeras más persistentes en el litoral. Por la tarde crecerán nubes de evolución que pueden derivar en chubascos tormentosos, más probables en el interior.
La situación se mantendrá el viernes, con inestabilidad atmosférica que dejará abundantes nubes bajas en la mitad oeste y chubascos localmente tormentosos en zonas del interior por la tarde, además de nieblas costeras que no se marcharán en todo el día, bajando de nuevo las máximas.
El aire frío en altura y, por lo tanto, la inestabilidad atmosférica continuará el fin de semana, con máximas en Vigo que se prevé que se queden en los 23 grados y cielos con nubes bajas en la mitad oeste.
La agencia gallega prevé que la próxima semana comenzará con dominio de las bajas presiones pero señala que progresivamente se irá ganando influencia anticiclónica y la circulación del nordeste se irá imponiendo, subiendo las temperaturas poco a poco.