En el corazón de Vigo, en la calle Sanjurjo Badía, la artista sevillana María Ortega ha dejado su huella con un nuevo mural titulado ‘El presente desde el que miramos‘, una obra que embellece el entorno urbano y invita a la reflexión. Inaugurada ayer, 8 de julio, esta pieza se suma al proyecto Vigo Cidade de Cor, consolidando a la ciudad como un lienzo vivo de arte urbano.
Una artista comprometida con el arte y la comunidad
María Ortega, licenciada en Bellas Artes por la Universidad de Sevilla, doctoranda y formada en la Accademia di Belle Arti di Brera en Milán y en el Máster de Arteterapia de la Universidad Pablo de Olavide, es una figura clave en el arte contemporáneo español. Su trayectoria, marcada por la fusión de pintura, muralismo y proyectos comunitarios, refleja un compromiso con lo social que comenzó en 2008 con una intervención en los campamentos de refugiados saharauis. Desde entonces, ha llevado su arte a contextos diversos: hospitales (UCI, oncología, pediatría), centros penitenciarios o barriadas periféricas, Ortega combina su labor como arteterapeuta con una práctica artística que invita al diálogo y la introspección.
Con más de veinte exposiciones individuales en galerías como La Caja China, Luisa Pita o Neilson Gallery, y presencia en ferias internacionales como Affordable Art Fair en Londres, la artista andaluza ha recibido reconocimientos como el Premio Arte y Compromiso de la Universidad Pablo de Olavide y la Mención Especial Malagacrea. Su obra, que explora el microcosmos vegetal con una mirada poética, no solo embellece: busca conectar con el espectador a través de la emoción y el autoconocimiento, convirtiendo cada proyecto en una “cartografía de vida”, según su propia definición.
El presente desde el que miramos
El mural ‘El presente desde el que miramos‘, ubicado en Sanjurjo Badía, transforma un espacio cotidiano en un lugar de contemplación. Según Vigo, Ciudad de Color, la obra de Ortega “achega sensibilidade ao entorno urbano e nos invita a mirar máis alá”, por ello se convierte en una invitación a detenerse y reflexionar sobre nuestra percepción del presente. Inspirada en su fascinación por lo vegetal, la pieza combina formas orgánicas y colores vibrantes que evocan atmósferas llenas de poesía y misterio, características de su estilo. La artista, conocida por su capacidad para trabajar el simbolismo desde el detalle, crea un diálogo visual que conecta lo natural con lo humano, invitando a los viandantes a explorar su propio lugar en el mundo.
La obra no solo dialoga con el entorno, sino que lo resignifica, transformando una calle marcada por el tráfico y la funcionalidad en un espacio de introspección. Este mural se alinea con la apuesta de la ciudad por el arte urbano como herramienta de transformación social, uniendo la historia industrial de Vigo con una mirada contemporánea.
Un impacto más allá de la pared
La intervención de María Ortega en Vigo no es solo estética: es un acto de conexión comunitaria. Su proceso creativo, que suele involucrar a colectivos en contextos sociales complejos, refleja su filosofía de que el arte es un viaje vivencial. En Sanjurjo Badía, la obra se ha convertido en un punto de encuentro para los vecinos, que han compartido en redes sociales su admiración por cómo el mural “da vida a la calle”. La sensibilidad de Ortega, combinada con su experiencia en arteterapia, hace que su trabajo trascienda lo visual, invitando a los transeúntes a reflexionar sobre su entorno y su propia historia.
Con ‘El presente desde el que miramos‘, Vigo refuerza su posición como referente del arte urbano en Galicia. En Sanjurjo Badía, este mural no solo pinta paredes: dibuja un nuevo horizonte para la ciudad.