La calle López de Neira, a pesar de encontrarse en pleno centro de Vigo, a escasos metros de Príncipe -la vía comercial por excelencia de la ciudad-, de Porta do Sol y de la Casa del Concello, cuenta con una imagen vieja y abandonada.
Han sido muchos los vecinos y comerciantes del entorno -también de Progreso y calle Pracer- los que pusieron el foco en el mal estado de la vía, todavía adoquinada como hasta hace poco estaba la vecina Doctor Cadaval, así como en los continuos problemas de filtraciones de agua y de falta de servicios básicos durante ciertos momentos.
Esta situación se acrecentaba todavía más con el abandono de varios edificios de la calle, como es el caso del esqueleto que existe en el número 38 -donde solamente se conserva la fachada- o el inmueble ubicado en la esquina con la calle Progreso, que recientemente logró licencia municipal de Urbanismo para convertirlo en un inmueble rehabilitado con 10 nuevas viviendas.
Pues ahora le ha tocado el turno a dicho esqueleto con una ambiciosa intervención que firma el arquitecto Javier Chillón Gómez. Y es que el Consello de la Gerencia que se celebra el próximo martes, 1 de julio, dará cuenta de la autorización para llevar a cabo la obra de reconstrucción y reedificación con rehabilitación de la fachada -protegida- del viejo inmueble ubicado en el número 38 de López de Neira.
La actuación, con un presupuesto de 585.988,75 euros, está impulsada por Inversiones Enbergar XXI S.L., quien ya presentó la solicitud de licencia para ejecutar esta obra por primera vez en marzo del año 2024.
Tras múltiples requerimientos urbanísticos, finalmente el Consello de la Gerencia otorga su visto bueno para reformar este edificio que califica de «plurifamiliar entre medianeras» y en el que se prevé dar una nueva vida a todo el entorno. Uno de ellos fue conseguir la declaración de excepcionalidad debido a las condiciones de protección del edificio, incluido en el Plan Especial de Edificios a Conservar PEEC de Vigo.
Una vez pasado dicho trámite, la empresa tiene luz verde para llevar a cabo la reforma, tras la que se logrará un inmueble que estará compuesto por planta baja, tres plantas y bajocubierta para contar con un total de 6 viviendas. Además, tendrá 7 prazas de garaje en planta baja y otros 7 trasteros en la planta primera.
Así, con la reestructuración y ampliación con el vaciado interior y la conservación de la fachada, los técnicos consideran que «se mejorarán las condiciones de funcionalidad, seguridad y habitabilidad del edificio».
Zona ajardinada
Pero la actuación en la parcela irá mucho más allá ya que, según consta en el expediente municipal, la operación está ligada también al número 40 -que se tendrá que ejecutar en una segunda fase y con una nueva licencia- y a la cesión de uso en superficie de unos 139,12 m2 del ámbito, concretamente del propio nº 38 de la calle López de Neira (103,12 m2) pero también del solar posterior que da al número 31 del Caleixón da Pomba (36 m2), una zona que fue puesta en valor hace años por Emaús con la realización de múltiples actividades sociales y culturales para regenerar el barrio.
De hecho, se prevé crear una zona ajardinada en este ámbito derribando los muros que delimitan la parcela -ya incluido en el proyecto presentado y que acaba de obtener luz verde- además de generar un nuevo corredor de entrada al edificio que se construirá y el cual tendrá acceso por un tramo de escaleras que se habilitará frente a la entrada al callejón por la calle Pracer.
Con todo, se da así un paso más para dar una nueva vida a una zona del centro de la ciudad que lleva muchos años abandonada pero que, en los últimos meses, parece haberse activado desde Praza do Rei para reformar y también humanizar este ámbito.
El reciente inicio de obras en el Paseo de Granada y la mejora de Doctor Cadaval se suman a los proyectos que el Concello ha puesto en marcha estos últimos meses para ‘dibujar’ las mejoras de la calle Pracer y Progreso, tal y como informó VIGOÉ.