La CIG está estudiando “seriamente” presentar una demanda contra el Concello de Vigo a raíz del accidente sufrido en la madrugada de este jueves por un bombero de la ciudad de 58 años, que se rompió la clavícula después de que le cayera encima la rama de un árbol que bloqueaba la carretera en Fragoselo y que miembros del parque de Balaídos estaban intentado podar y retirar.
Delegados del sindicato, que contactaron con la víctima para interesarse por su estado, han achacado a la “falta de personal” en el cuerpo que se haya desplazado en primera salida a un trabajador de esa edad y, según alertan, con escasa asistencia. Precisamente los bomberos llevan en huelga desde agosto para reclamar más efectivos de los que está incorporando el Ayuntamiento y de los que se prevé sumar con la nueva Oferta Pública de Empleo.
Pero, además, el comité de huelga lleva tiempo alertando de que casi la mitad de la plantilla tiene más de 55 años, una circunstancia que consideran especialmente grave en un trabajo de riesgo como éste. De hecho, subrayan que en algunos parques los que sobrepasan esa edad no realizan intervenciones.
Desde la CIG sostienen que el Concello no está cubriendo las garantías mínimas del servicio que se debe prestar a los ciudadanos porque “los servicios mínimos no cumplen con las necesidades de la ciudad”, lo cual “genera riesgos como éste”. Así, la central está valorando presentar esa demanda por un posible delito contra la salud de los trabajadores.
“Entendemos que nuestro trabajo tiene riesgos que no se pueden contralar, pero hay que dar garantías y disponer de protocolos de actuación para garantizar la seguridad, algo que con la falta de personal que arrastramos no se está cumpliendo”, advierten.
El alcalde de Vigo, Abel Caballero, ha declarado tras el suceso que los bomberos desplazados a Coruxo esta pasada madrugada estaban trabajando “con todos los elementos de seguridad funcionando”.