Las razones para ello se basan en el plan que maneja el Concello de que la nueva bancada esté lista para el comienzo de la campaña 2021-22 independientemente del mes en el que arranquen. “Si empezamos en marzo acabaríamos en junio de 2021 y así la grada empezaría a ser usada en agosto. Si empezamos en mayo el inicio de la grada también será en agosto de 2021”, ha explicado.
Aunque Caballero lo ha negado durante la rueda de prensa que ha ofrecido este viernes, ese inicio de obras en el mes de marzo, como muy pronto, supone un nuevo retraso con respecto al último ofrecido, que era en enero. “Da igual que empecemos en marzo que en mayo”, ha insistido el regidor.
El alcalde, tras la sanción de La Liga al Celta, también ha dejado caer que el club debería ocuparse de reforzar la iluminación de Balaídos si esta no alcanza los estándares impuestos. “El Deportivo va a invertir 1,6 millones en la nueva iluminación de Riazor”, ha declarado. Aunque ha asegurado no querer entrar “en las relaciones entre el Celta y la Liga”, Caballero ha repetido varias veces el dinero que va a destinar la entidad herculina en el estadio municipal de A Coruña.
La obra se irá por encima de los 15 millones
El regidor vigués también informó este viernes de que el proyecto definitivo de la reforma de Marcador está a punto de terminarse y que contempla un aumento del presupuesto necesario. De los 13,8 millones previstos –tanto el Concello como la Deputación de Pontevedra han consignado ya 6,9 millones cada uno- se pasaría a “más de 15 millones”. “El coste exacto se sabrá dentro de unos días”, ha precisado.
Caballero también reveló que en unas horas remitiría al fin la carta que anunció que enviaría al presidente de la Xunta para exigirle de manera formal y por escrito que aporte una tercera parte del presupuesto, uniéndose así a la administración local y a la provincial.
Para defender su posición, el alcalde apuntó que “el Gobierno vasco invirtió 7 millones de euros en el estadio del Alavés y 10 millones en el de la Real Sociedad”.