El viento, además, estuvo acompañado de la lluvia. Al amanecer, Vigo ya acumulaba 15,2 litros por metro cuadrado en una jornada de lunes en la que no se prevén más sobresaltos.
Todo este panorama hizo que la noche fuera complicada para los servicios de emergencias, sobre todo para los bomberos de Vigo, que tuvieron que atender varias incidencias por caídas de árboles o por problemas con el alumbrado de Navidad, que sufrió destrozos en diferentes puntos de la ciudad como Ronda Don Bosco y Elduayen, según han informado los bomberos.
En esta última calle, algunos elementos decorativos quedaron arrancados de cuajo total o parcialmente. A primera hora del día se podían ver apartados sobre la acera restos de las líneas que cuelgan por la ciudad. No es la primera vez este mes que los temporales provocan destrozos en Vigo y obligan a intervenir a los bomberos.
Así, los operarios del Grupo Ximénez tendrán que proceder en las próximas horas a su reposición. No obstante, los riesgos para la luces de Navidad no quedan aquí, ya que el pronóstico del tiempo prevé otra madrugada desapacible el próximo jueves, nuevamente con viento intenso y lluvia persistente.
Parte policial
Por su parte, la Policía Local ha informado de que tuvo que prestar unos 40 servicios entre las 03:30 y las 07:30 horas. En diversas calles -García Olloqui, Ángel de Lema y Marina, Estrada de Valadares o Toledo- varios contenedores fueron desplazados por el viento y tuvieron que ser retirados de la calzada.
En la calle Concepción Arenal, un contenedor que se desplazó y colisionó contra un turismo estacionado. En la zona peatonal del Calvario, se movieron varios carteles publicitarios de la campaña ‘Islas Cíes, Patrimonio de la Humanidad’.
Asimismo, algunas vallas de obra resultaron desplazadas como fue el caso en la Vía del Norte, donde llegaron a obstaculizar el tráfico. Mientras, en la avenida Atlántida también se desplazaron vallas de obra, aunque no se llegó a obstaculizar el tráfico; caso que también se repitió en la calle Coruña.
Igualmente, una farola ubicada en Camelias, en las proximidades de la Praza do Rei, ofrecía peligro de caerse y fue necesaria la intervención de electromecánicos. Además, un árbol fue derribado en la Estrada de Valadares ocupando parte de la calzada. En Rorís, un poste del tendido telefónico cayó sobre la vía
