La última semana, que ha vuelto a ser especialmente seca, no ha hecho más que reducir las reservas de agua y agravar la alerta por sequía. Los datos lo dejan claro. Eiras se encontraba hace ahora una semana al 38 por ciento de su capacidad y Zamáns estaba al 36 por ciento.
El pasado mes de octubre, un vídeo de Beto García mostraba el descenso del nivel en Eiras respecto al mes de mayo, cuando estaba al 100%. Este domingo, 3 de diciembre, nuevas imágenes muestran la presa en una situación en la que nunca se había encontrado, mostrando edificaciones como un puente que nunca había quedado al aire desde la construcción del embalse.
Un vídeo del mismo autor realizado en mayo mostraba la presa a rebosar, al 100% de su capacidad, después de una primavera lluviosa. Ahora, seis meses después el aspecto es desolador.