El conjunto vigués ha conseguido ganar 10 de los 17 encuentros que se ha perdido Orellana por lesión en lo que llevamos de temporada entre las tres competiciones. En los otros 7 encuentros, logró 3 empates y encajó 4 derrotas. Si nos ceñimos solo a la Liga, sin Orellana el Celta ha sumado 19 de 30 puntos posibles, ya que ha conseguido 6 victorias y 1 empate y ha encajado 3 derrotas en su ausencia.
Orellana sufrió una lesión muscular en un entrenamiento con su selección a principios de septiembre. Estuvo un mes de baja y dos semanas después de su reaparición, se volvió a lesionar al producirse un complicado esguince de tobillo en el partido ante Las Palmas. Tras más de un mes parado, volvió a tener un retorno fugaz, ya que a mediados de diciembre sufrió la rotura fibrilar en el músculo sartorio del muslo derecho de la que se acaba de recuperar.
El Celta ha aprendido a vivir sin Orellana. El buen momento goleador de Iago Aspas, la explosión definitiva de Theo Bongonda, la fiabilidad de Tucu Hernández y, sobre todo, la versatilidad de Daniel Wass han sido claves para que se notase poco la ausencia del chileno.
Eduardo Berizzo reconocía este domingo tras el partido ante el Málaga que es una buena noticia que el equipo no dependa de un único jugador para crear juego y llevar peligro al área contraria.
«Tratamos de que el funcionamiento siempre suceda indiferentemente del nombre propio. Eso encierra un gran mérito del equipo, de sobrellevar ausencias tan importantes como la de Orellana. Si algo nos ha caracterizado como grupo, es sobreponernos a ausencias, a ventas y a fichajes, a todo lo que tiene que ver con la atmósfera del equipo. La ausencia a día de hoy ha sido suplida. Me encantaría tenerlo. Ojalá lo tengamos el jueves. Pero me alegro de que el equipo sea capaz de no depender de nadie y depender de todos», explicó el técnico.
